lunes, 25 de enero de 2016

Deja de ser quien crees que eres y conviértete en quien realmente eres

Conozco a personas que prefieren construir sus vidas detectando continuamente fugas emocionales, que les arrastran siempre de un lugar a otro sin descanso, con el obstinado propósito de solventar algo que consideran, podrían cambiar con esmero.

Permíteme por un momento, que hoy me dirija a ti, con la única intención no más allá de una mera reflexión llegados a este punto, donde la enseñanza pesa más que la decepción.

¿Has pensado que tal vez no puedas cambiar aquello que pretendes, porque sabiamente podría estar formando una parte indivisible de ti?

Seguro que donde te encuentras, ya oíste hablar de la esencia, ese conjunto de características permanentes e invariables (procedentes de la "Gran Fábrica") que constituyen nuestra naturaleza como seres vivos y sin las cuales no seríamos quienes somos.

Pues bien, quizás no se trata de analizar constantemente esas pequeñas imperfecciones, que nos hacen ser la persona que somos. Igual sólo estamos aquí, para SER nosotros mismos.
No gastes toda una vida intentando llegar a ser quien quieres ser. Únicamente sé tú y vívelo con total transparencia.
Para el Universo ya eres perfecto, eres una de las piezas necesarias que lo conforman, así tal como es ahora tu existencia. Y para quienes te rodean, aún eres más perfecto si cabe. No podrías haber existido de otra manera. Pues solo tú, a cada persona, entregas magistralmente la parte de ti que les corresponde. Ya irradias paz, amor y bondad. Es trabajo de quien te observa y comparte contigo, el sentirlo de esa única manera posible.

Desmenuza cada instante que esta vida y no otra te regala. Es lo único certero, a día de hoy, con lo que contamos.
Es admirable y te honra como persona, decidir evolucionar emocional y espiritualmente, pero no permitas, por favor, que se te marchite la vida en ello.

Nadie puede prometer que volvamos a encontrarnos. El aquí y el ahora, es lo único real que conservamos. Un presente en común nos situó en el mismo camino y coincidir en tiempo y espacio contigo, para mi ya es "el milagro".
Ahora sólo VIVE y valora todo lo que se te ha dado.

Si aún así, consideras seguir con tu batalla, mientras alcanzas esa perfección en la que trabajas, disfruta del camino y de aquéllos que te vayas encontrando a cada paso.
Presta atención, escucha siempre lo que vienen a decirte, pero atiende con los oídos del corazón.
A veces llegan a nosotros mensajes en forma de respuestas, a preguntas que creemos no haber formulado. Posiblemente ésas sean las cuestiones más reveladoras para el camino de nuestra vida, más que cualquier otra solución que pudiéramos haber estado esperando, sobre algún interrogante expuesto anteriormente a conciencia.

La verdad no es ambigua y la vida nos habla de su autenticidad más alto y claro de lo que podamos imaginar.


Recuerda: Nunca es tarde para dejar de ser quien crees que eres y convertirte en quien realmente eres. 


Honesta y real es la vida que tenemos, sé honesto y real contigo y tus sentimientos...






No hay comentarios:

Publicar un comentario