lunes, 20 de junio de 2016

Una segunda oportunidad

Después de todo este tiempo, hoy necesito escribirte…

Sí, él lo está intentando todo. Su corazón lo sabe y te quiere recuperar. Pero desconoce de qué más formas puede llamarte, para que vuelvas a envolverle en tu abrazo.

¿Sabes? Ahora cuando se queda dormido, te disfruta intensamente, mientras te sueña.
Te ama, como antes jamás había conseguido. Quizá nunca fue consciente del todo...
Echa de menos las canciones con las que le sorprendías y ahora a nosotros nos enamoran. Las sonrisas que sin previo aviso le pintabas. Esa alegría que traías contigo, sobre todo los fines de semana. Y todos los buenos momentos que a diario le regalabas... Hasta los más pequeños detalles con tu firma, que a veces ignoraba y al caer la tarde, en silencio sobre ellos meditaba. ¡Qué satisfecho se sentía, porque le llenaban!

Hoy más que nunca te sigue pensando, añorando... Quizá entonces no te dio el valor que merecías, pero en los últimos meses, de golpe aprendió muchas cosas y ha recapacitado.
Sin embargo, vuestros minutos se hacen eternos y vuestros días se vuelven lejanos.
No entiende que hace poco, incluso parecía le acosabas y ahora desaparezcas de repente.
Por ese motivo, las dudas y un miedo le enfrían. Y el no saber si volverás a reencontrarte con él.

Pero todos merecemos una segunda oportunidad ¿No crees?

Algunas noches se pregunta, si ya le habrás olvidado. Y se lamenta...

“¿Por qué no aparece? ¿Por qué no quiere escucharme?
Si se asoma por mi ventana y otras veces se esconde… ¡así no puedo encontrarla! 
¿Por qué cuando llega, no viene para quedarse?” 
Se cuestiona frente a mí, desolado... “¿Será un capricho nuevo el hacerse de rogar o una fuerza mayor del destino que algún día me desvelará? 
En mis mejores días imagino que puede estar preparando nuestra próxima cita a lo grande. Quizá elija la mejor fecha del año para sorprenderme. Y que ese momento tan esperado, llegue a ser tan especial, que ni yo mismo vaya luego a olvidarlo...
¿Cómo puedo decirle que mis esfuerzos diarios se los dedico a ella?
Qué cierto aquello de... "nadie sabe lo que tiene, hasta que lo pierde". ¡Qué cierto!
En los pocos años que tengo, es la que más me ha enseñado. 
Aunque en ocasiones muestre su peor lado, después siempre sabe recompensarme el mal trago. 
De sabiduría magistral y belleza única. ¡Así es y así la recuerdo!
Cuando te lleva la contraria, solamente lo hace para ver si te pones de su lado. Y si no te convence, te ofrece nuevas oportunidades. ¡Su poder es tan grande que, inexplicablemente, le acabas diciendo sí con los ojos cerrados! 
Misteriosa hasta el infinito, perspicaz y mágica como ella sola.”

Como ya te habrás dado cuenta, querida, no hay amor más grande ahora, que el de mi enamorado amigo.
Y sinceramente, ya no sé qué más hacer, para ayudarle a recuperar lo que tenía contigo.
Sólo puedo mostrarle el camino de vuelta. Pero si tú no estás ahí... Tu camino pierde completamente el sentido.

Por eso hoy me uno a su llamamiento. A su grito de guerra desesperado por recuperarte y recobrar su esencia.
Se está amarrando como nadie más lo había hecho, a tu deseo, aun así flaqueen todavía sus fuerzas.

Termino esta carta con unas palabras que, desde la UCI, me dejó para ti. Y hoy te vuelve a reclamar sincero... 

“Vuelve pronto, que desde hace un tiempo, en mi cama te espero solo! 
Vuelve pronto, te necesito aquí conmigo, 
para seguir cumpliendo sueños! 
Por favor, vuelve pronto, que yo sin ti,
aunque no quiera... muero.

Te quiero, Vida.” 

Por favor, no le hagas esperar demasiado. Que el tiempo implacable está consumiendo su cuerpo, sus ganas y nuestra fe desmedida.

¡GRACIAS VIDA! 
Porque te debo todo y aún creo en tus milagros… 
Yo también te amo.